















El objetivo de este proyecto es facilitar el conocimiento de las actividades de la Comunidad Islámica en la Región de Murcia al resto de ciudadanos, poner en valor su cultura desde el respeto a las diferencias y creencias y dar visibilidad a sus lideres, sus comunidades y sus actividades.
En la Región de Murcia la concepción cultural y social que se tiene hacia el Islam «no ha variado», por lo que es necesario trabajar por normalizar la situación del colectivo musulmán en el país y por mejorar su nivel de integración, y por ello un primer paso es dar visibilidad a esta comunidad.
En esta línea, hay que destacar que uno de los «principales» problemas de la sociedad española es que mantiene «una percepción equivocada del Islam», pues lo sigue considerando como un fenómeno migratorio y le otorga la misma estructura, cuando la realidad cuantitativa y cualitativa de sus miembros ha variado mucho con el paso de los años. Tanto es así que, en algunos casos, ya puede hablarse de musulmanes «de segunda o tercera generación», que son ciudadanos españoles.
El porcentaje de musulmanes en nuestro país es difícil de cuantificar porque, aunque la cifra apunta al millón, existe un 18 por ciento de los llamados musulmanes de segunda generación, nacidos en España, pero que no es creyente.
En la Región de Murcia viven, trabajan y estudian cerca de 90.000 ciudadanos de religión islámica, algunos de nacionalidad española , otros de distintas nacionalidades y procedencias.
La Comunidad Islámica de Murcia, constituye el segundo grupo religioso en cuanto número de fieles en nuestra Región, no obstante, y pese a su importancia, tiene serias dificultades para su práctica religiosa; abrir una mezquita provoca rechazo social en el entorno donde se ubica, los niños musulmanes no reciben clases de religión islámica en las escuelas, y sus numerosas actividades son, normalmente, puestas en entredicho por muchos ciudadanos, seguramente porque «aquello que se desconoce provoca rechazo».
Los cerca de 100.000 ciudadanos musulmanes que residen en la Región de Murcia, forman una comunidad variada, plural, con diversos grados de integración, que mantienen sus tradiciones religiosas y culturales. Los más jóvenes de esta comunidad, han nacido aquí, hablan español como idioma propio y están educándose en los valores democráticos. Unos han llegado aquí como emigrantes, otros nacieron aquí y tienen DNI español, y otros son autóctonos, bautizados como católicos pero convertidos al Islam. Ejercen profesiones diversas, hay profesores, médicos, enfermeras, farmacéuticos, abogados, periodistas, trabajadores sociales, albañiles, cocineras, estudiantes, campesinos, enlosadores, dependientes, comerciantes…
Los musulmanes conversos tienen un peso especifico en algunas asociaciones, aumentando las conversiones escalonadamente en los últimos tiempos.
Las 55 mezquitas u oratorios que existen en la región, no solamente son lugares de culto y rezo, también son de aprendizaje del árabe y del español, lugar de conferencias y encuentros, centros culturales y festivos.
En la Ciudad de Murcia existen dos grandes mezquitas, la del Barrio del Carmen y la del Barrio de San Andrés, las dos grandes zonas de residencia de población musulmana de la ciudad.
Las mezquitas son bajos comerciales generalmente y están consideradas como Comunidades Islámicas,.
La Región de Murcia es la tercera Comunidad de España por número de centros de culto musulmán, según el Observatorio para la Pluralidad Religiosa.
Como fiel reflejo de la sociedad actual, en los cementerios ya conviven otras religiones. En el camposanto del Municipio de Murcia la comunidad islámica también entierra a sus fallecidos. El Ayuntamiento ha creado recientemente 100 nuevas fosas para los creyentes de esta religión empadronados en la ciudad.
Se suman a las 110 que ya se construyeron en 1997, pero que se ocuparon, sobre todo, por fallecidos de las provincias limítrofes en el único cementerio musulmán de la Comunidad de Murcia, que se ubica junto a la mezquita del camposanto de Espinardo.
Por otro lado, y aunque el acuerdo del 92 garantiza el derecho de los presos, militares y enfermos musulmanes ingresados en centros sanitarios a recibir asistencia religiosa proporcionada por los imanes o personas designadas por las comunidades islámicas, en la actualidad sólo se contabilizan once imanes en las cárceles españolas (uno en Murcia) gracias a un acuerdo suscrito con el Estado en 2007.
Dos asociaciones representan a la mayoría de los musulmanes, FIRM (Federación Islámica de la Región de Murcia) y UCIDE (Unión de Comunidades Islámicas de España).
Son frecuentes los encuentros, las reuniones, los cursos de formación que se celebran por toda la región y en los centros islámicos. En todos ellos existe una preocupación latente, la participación social en la sociedad democrática española.
No todos los musulmanes de Murcia están asociados, así como no todos son religiosos practicantes. Habrá un 20% aproximadamente que se declara laico.
Las asociaciones representan a las Comunidades Islámicas, no a la población musulmana en su totalidad.
Murcia es una de las autonomías que aún no ha contratado a profesor alguno para impartir religión islámica en las escuelas, pese a las reiteradas demandas de la comunidad islámica en la Región, que agrupa a 10.237 alumnos musulmanes.Pero no es la única, ya que, de hecho, sólo seis de las 17 autonomías españolas, a saber, Andalucía (con 16 profesores), Aragón (3), Canarias (1), Ceuta (14), Melilla (11) y País Vasco (1), en las que la competencia es del Estado, incluyen en la etapa de Educación Primaria clases de religión islámica. Al respecto, un informe de la Comisión Islámica destaca la contradicción de que las regiones con más número de alumnos musulmanes que son, en este orden, Cataluña, Madrid y Murcia, no sólo no ofrecen los medios para impartir religión islámica, sino que, además, «no cuentan con contratación autonómica ni autorización de impartición de esta asignatura si contratasen a los profesores de religión los mismos padres de alumnos».Eso supone que, a día de hoy, el 90 por ciento del alumnado musulmán en España carece de clases de ´su´ religión y que el 90% del profesorado de religión islámica habilitado para dar clases según el acuerdo de 1992 se encuentra desempleado
Los jóvenes musulmanes hablan como idioma primario el español, acudiendo los niños y adolescentes mayoritariamente, a las escuelas de árabe de los centros islámicos que también se abren para personas de religión no musulmana. Estos jóvenes aprenderán así tres idiomas, el español como propio, el árabe y el ingles obligatorio en la educación española.
Acceden a Módulos profesionales mayoritariamente y a la Universidad, donde existe un número significativo de estudiantes musulmanes en los distintos grados y masteres.
Son estudiantes muy activos y algunos ostentan cargos de representación estudiantil o de Asociaciones de Jóvenes Profesionales.
La Comunidad musulmana mantiene un comercio variado y acorde con sus tradiciones religiosas, en la ciudad de Murcia se sitúa mayoritariamente en el Barrio de San Andrés y en el Barrio del Carmen, carnicerías halal, peluquerías, bazares, locutorios, cafeterías, restaurantes, alguna discoteca situada en el Polígono de San Ginés, dan cuenta de la vitalidad de esta comunidad.
Existe un matadero de carne Halal en Mercamurcia.
Cafeterías y teterías conviven con bares y restaurantes.
La sanidad pública cuenta con un único mediador cultural, en el Hospital Reina Sofía, que atiende a todas las personas de nacionalidad extranjera con dificultades para expresarse en el idioma español, su labor es muy importante ya que no consiste en la mera traducción si no en la interpretación de usos y modos de las distintas culturas, cuestión que facilita la atención sanitaria a los médicos y enfermeras que atienden a estos pacientes.
Cuando inicié esta proyecto partía de la voluntad de utilizar la imagen para mostrar otras realidades que normalmente no salen en las portadas de los periódicos, que se desconocen y que, al no ser visibles, públicamente parece que no existen.
Es necesario entender este trabajo no como una investigación sobre población emigrante, si no como una investigación sobre una comunidad de ciudadanos que tienen en común la religión musulmana en su concepción mas amplia, como hecho religioso y como hecho cultural y social, es necesario para ello establecer una diferencia nítida entre los conceptos de nacionalidad y religión en una sociedad como la española en la que la «homogeneización» ha desaparecido.
La cifra actual de ciudadanos españoles que procesan el Islam supera el medio millón de personas.
Por un lado, son más de un millón los musulmanes y casi 800 sus comunidades religiosas, si bien es cierto que este crecimiento no parece que vaya a mantener su progresión. Por otro lado, no son inmigrantes. Hablamos de muchos ciudadanos nacionalizados, de sus hijos que son españoles y de la comunidad conversa.
La Web Islam en Murcia, con la cual colaboro asiduamente, cumple en ese sentido un papel fundamental, y su impulsor y director ha sido la persona que ha facilitado el desarrollo de este reportaje. Paulino Ros, me ha abierto puertas, presentado personas y alentado en todo momento, sin él todo hubiera sido mas difícil.
El proyecto ha tratado de dar una visión general de la comunidad, y es por ello que se ha estructurado en aquellos apartados que dan una visión clara de los usos sociales y comunitarios de los ciudadanos musulmanes, también se ha pretendido dar a conocer a las distintas y variadas personalidades que de alguna manera representan la comunidad musulmana en la región:
Las mezquitas y el hecho religioso, las escuelas de árabe y las escuelas de español para mujeres, las tiendas y comercios, la alimentación, las actividades de participación social y las personas mas representativas de los distintos colectivos que la componen.
No he tenido dificultades para realizar esta serie de imágenes, al contrario, excepto momentos y personas concretas, la cámara y yo nos hemos podido mover en libertad y sin cortapisas, tanto en el interior de las mezquitas como en centros culturales y en las distintas asociaciones.
La conversación, la charla tranquila, compartir un té o una comida ha sido mas importante que la toma de fotografías, eso viene después o no viene, depende del momento.
Nunca me plantee que por el hecho de ser mujer iba a encontrar impedimentos para realizar las fotos, y tampoco la Comunidad Islámica me los planteó. Nadie me ha pedido que me cubra la cabeza para entrar, alguien me dijo ” tu transmites respeto a nuestra cultura y a nuestra religión, nosotros te respetamos tal y como eres”
Detrás de cada una de las fotografías hay una historia, hay una conversación, una mirada, incluso unas risas y a veces ha surgido una buena amistad.
En esta serie encontrareis a los lideres de la Comunidad Islámica, Riay Tatary, Mounir Benjelloun, Mbarek Demmouche, Abderrahim Nachit,, Mohamed Reda el-Qady,Ana GarcíaYepes (presidenta de la Asociación Al Baraka de Lorca, a las alumnas de español de la Universidad Popular de Lorca, a los niños, niñas y mujeres que participaron en el encuentro que la asociación ONDA organizó en el Centro Cultural de Los Dolores ( Cartagena), a fieles de las mezquitas de San Pedro del Pinatar ,Los Dolores ( Cartagena), Torre Pacheco y Cieza, a los estudiantes musulmanes de la Universidad de Murcia, participativos y comprometidos con la sociedad, a los alumnos de las Escuelas de Árabe de los Centros Islámicos de Murcia y Torre Pacheco, al mediador cultural del Hospital Reina Sofía, a la presidenta nacional de la Asociación Crecer, a trabajadores y trabajadoras musulmanes, sus comercios, sus costumbres, nuestros vecinos ….variado, diverso, plural como la sociedad donde vivimos.
Me he encontrado con toda clase de personas, como en cualquier comunidad, pero son los niños quienes me han mirado mas libremente y con ojos confiados a la cámara y son ellos los que merecen no encontrar prejuicios y desconfianza en sus compañeros y vecinos. Es por ello que este proyecto pretende apostar por su presente y por su futuro en libertad y respeto.
